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Verano, playa, olas… y surfistas cabalgándolas. Seguro que a muchos se les pasa por la cabeza iniciarse en el mundo de la tabla. ¿No sabes cómo empezar? Te contamos algunos trucos para que el comienzo sea lo más ágil posible.
Elegir la tabla
Antes de nada lo que hay que hacer es seleccionar el elemento imprescindible para este deporte: la tabla.
Es recomendable empezar con tablas con alto nivel de flotabilidad, de punta redondeada, largas (alrededor de tres metros) y anchas. En el caso de que optes por una de segunda mano, revisa bien que no tenga demasiados toques. No olvides aplicarle parafina para mejorar la adherencia.
Escoger la playa adecuada
Empezar en playas no muy extremas es una buena idea. Es decir, fondos de arena y sin muchas corrientes. Es bueno comenzar en días sin mucho mar. Altura de olas entre 0,5 y 1,5 metro es un buen rango para principiantes. También es importante optar por playas sin mucha aglomeración de surfistas, ya que al principio es posible que seas un poco estorbo. Mejor un lugar tranquilo.
Remar
Sin duda alguna se trata de una técnica imprescindible en este deporte. Irás mejorando con el tiempo tu remada, pero en un principio es importante que practiques hasta con el mar en calma. Procura posicionar el cuerpo lo más centrado posible en la tabla para conseguir un deslizamiento eficiente. Ahuecar las manos y levantar el pecho te será de gran ayuda.
Pinchar (o Diving Duck)
Fundamental para llegar al lugar donde se cogen las olas (conocido como “pico”). Se trata de la técnica para pasar por debajo de las olas, evitando que estas nos arrastren continuamente. Esta técnica se puede realizar únicamente con tablas cortas. Se supone que empezaremos a pinchar cuando tengamos un poco más de nivel y entremos en playas con mayor oleaje. El buceo de pato consiste en sumergir la tabla justo antes de que la espuma nos alcance. Para ello tenemos que presionar la punta de la tabla hacia abajo y acompañarla con todo el cuerpo. Nos ayudaremos también con una rodilla para acabar de ejecutar la maniobra y pasar junto con la tabla por debajo de la espuma de la ola.
Ponerse de pie
El punto clave, y también más complicado. Es aconsejable practicar primero en parado, sobre la arena. Antes de nada debemos saber qué pie llevaremos delante. Es decir, si somos goofy o regular. Si has hecho algún otro deporte de tabla (snowboard o skate) lo sabrás, si no, hay varias formas de averiguarlo rápidamente. El movimiento para ponerse de pie, conocido como pop-up, tendrás que practicarlo una y otra vez. Hay que dar un pequeño salto en el momento que la ola te empieza a empujar y mantener el centro de gravedad bajo, es decir, ir algo inclinado.
Reglas de preferencia
Este es el principal origen de las disputas en el agua. Al fin y al cabo en la mayoría de ocasiones hay mucha gente peleando por una misma ola, y ello requiere que se establezcan una serie de normas para fijar a quien le corresponde cabalgarla. No conocer estas normas y acabar “robando” la ola a un local puede provocar enfados importantes. El que antes la coge, es decir, el que viene de más atrás con la ola, tiene preferencia. Si lo ves, o te gritan, deberás apartarte. Generalmente en las olas de izquierdas si viene alguien por tu derecha, tendrá preferencia. Y viceversa. Si cumples esta sencilla norma te evitarás muchos problemas.
A la hora de remontar, intenta hacerlo por un lateral del pico, y si viene un surfero hacia ti, deja que te esquive, o, en última instancia, pasa por debajo.
Ahora que ya conoces los puntos básicos del surf solo queda que te animes y te eches al agua. Solo la práctica hace al maestro.