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Hoy se han cumplido 100 años desde que el Club Deportivo Bilbao organizara, allá por 1912, la primera “Copa Pagasarri”. Aquella prueba conoció alrededor de 6 ediciones. Para BBK – Kutxabank, esta hace la número 22.
La edición de este año ha sido, sin duda, el producto final más bello, completo, y redondo de todas cuantas se han realizado, ya que los organizadores han querido integrarla en un múltiple marco: el internacional Kutxabank Mendi Film Festival que, además de unas sesiones cinematográficas de lujo, ha ofrecido actuaciones de calle: slack line sobre la ría, teatro vertical en el Casco Viejo, plantación de 1000 árboles autóctonos…
Hoy, por primera vez, la marcha ha salido con retraso: un minuto después de las 9:00, pero el motivo bien ha merecido la pena, ya que el gran escalador y artista francés, Antoine Le Menestrel ha realizado un verdadero espectáculo de teatro vertical sobre la fachada de la sede de Kutxabank de Gran Vía 23. A su término, justo a las 9:01 ha animado a cuantas personas abarrotaban en ese momento la Gran Vía, a comenzar la caminata hacia nuestro monte.
Con un día fantástico, la Marcha ha redescubierto el barrio del Peñascal, encaramándose por la pista que se eleva entre las dos canteras ya abandonadas.
El grueso de la Marcha ha alcanzado la cima a eso de las 10:30, disfrutando como no se veía desde hace tiempo, del espectáculo de una luz cálida y nítida propia de un día de viento sur. Como es habitual, más de la mitad de los participantes han tomado la salida por su cuenta, con diferentes caminos y horarios, confluyendo en las campas de la cumbre y disfrutando del caldo, el bocadillo y el obsequio en un día excepcional.
La organización calcula en cerca de 9000, las personas que, bien por el camino oficial, bien por otros, ha alcanzado hoy la cima del Pagasarri.
Es de lamentar, no obstante, el fallecimiento de una persona de 72 años, al parecer por un fallo cardíaco en las inmediaciones del collado del Pastorekorta. A pesar de todos los esfuerzos de reanimación, realizados por un médico y varios miembros del servicio de socorro de la Organización de la Marcha durante 50 minutos, no ha sido posible reanimarle. Toda la organización, al igual que Kutxabank, quiere hacer llegar a su familia sus más sinceras condolencias.