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Una peregrinación para los mendizales bilbaínos. La Marcha al Pagasarri se ha convertido ya en una tradición pre-navideña para los aficionados vizcaínos al monte. Este año, además, se cumplen 25 años de esta excursión para toda la familia.
Alrededor de 10.000 montañeros participarán el próximo domingo 20 de diciembre en la XXV Marcha al Pagasarri. Una vez más el recorrido volverá a ser apto para toda la familia. ¿Te atreves con el último desafío del año?
Si todavía no te has inscrito, puedes hacerlo en la web de Kutxabank, www.Kutxabank.es, y en la red de cajeros automáticos de Bizkaia, con un precio de 4,5 euros para clientes de la entidad.
Los más rezagados podrán acudir entre el 14 y el 19 de diciembre al punto de registro que se habilitará en la Sala BBK (Gran Vía 12-21) o apuntarse en el mismo punto de salida (Gran Vía 30) el 20 de diciembre, a partir de las 7:30 horas. El precio general de la inscripción para no clientes de Kutxabank será de 9 euros.
‘Hamaiketako’ en la cima
El recorrido que ha diseñado Kutxabank para la XXV edición de la marcha al ‘Paga’ volverá a ser apto para toda la familia. Aunque es algo más largo que el de la pasada edición, 11,9 km, se podrá finalizar en algo menos de dos horas.
Comenzará frente a la sede corporativa del Grupo financiero, en la Gran Vía bilbaína, a las 9:00 de la mañana. El recorrido estará perfectamente señalizado y contará con diversos puntos de asistencia sanitaria, que se situarán en zonas estratégicas perfectamente visibles.
Todas aquellas personas que alcancen la cima podrán degustar el tradicional almuerzo o ‘hamaiketako’ que ofrecerá la organización, compuesto por caldo, bocadillos, agua y vino. Para solicitar el almuerzo, así como para retirar el obsequio conmemorativo de la marcha, será imprescindible presentar los comprobantes de la inscripción.
Un euro solidario para la recuperación de los bosques
La colaboración entre Kutxabank y Lurgaia permitirá que los participantes en la marcha sean copartícipes en la recuperación de los bosques autóctonos vascos.
Kutxabank destinará un euro por cada persona inscrita a esta entidad sin ánimo de lucro que se dedica a favorecer la conservación y la gestión del patrimonio natural. Una de las prioridades de Lurgaia consiste en restaurar y conservar los bosques autóctonos, tarea en la que la entidad financiera es su colaboradora desde 2010.
La situación actual de los bosques vascos dista mucho de la original, ya que su espacio ha sido ocupado por asentamientos urbanos e industriales y por plantaciones de especies madereras de crecimiento rápido. Por ello, los robledales, que eran el bosque natural más extendido y uno de los símbolos de Bizkaia, ocupan en la actualidad menos del 5% de la superficie original. Una de las acciones de Lurgaia consiste, precisamente, en favorecer la recuperación de este tipo de espacios forestales autóctonos.